Cuidados y cultivo del Árbol de Nogal

Vimos en una primer parte sobre el árbol de Nogal, un acercamiento y las principales características de este árbol. En esta oportunidad, ahondaremos en los cuidados que necesita este árbol tan preciado, para conseguir un sano desarrollo.

Cuidados árbol de  Nogal
Cuidados árbol de Nogal

Cómo cultivar un árbol de Nogal

Manejo del Suelo: La especie se adapta a distintos tipos de suelo, en general, aunque prefiere suelos profundos, permeables, sueltos y de buena fertilidad.

Para el desarrollo del nogal resultan más importantes los componentes físicos por sobre los químicos, ya que necesita suelos con drenajes rápidos y que almacenen agua.

Para conseguir el drenaje rápido el suelo debe formarse por cantos rodados, caliza fisurada, etc., mientras que el almacenaje de agua, va a depender de la proporción de materia orgánica, de humus y arcillas del suelo.

Antes de la plantación convendrá preparar cuidadosamente el terreno. Conviene también, dar una o dos aradas superficiales antes de la plantación.

El nogal se desarrolla en suelos con pH neutro, siendo el pH ideal del suelo oscilante entre 6.5 – 7.5. Algunos patrones se adaptan a suelos mas ácidos aun (J. nigra) y a suelos mas alcalinos, calizos (J.regia).

Temperaturas: Esta planta necesita de calor durante su período vegetativo, si las temperaturas medias son muy bajas (menos de 10º C), y no hay muchos meses con temperaturas óptimas, el nogal no resiste y tiende a desaparecer.

Lo conveniente es evitar, lugares con temperaturas primaverales que puedan descender a menos de 1,1 ºC., porque puede causar daño por heladas en las inflorescencias masculinas, brotes nuevos, y pequeños frutos.

Por ejemplo, en EE.UU., el cultivo de las nueces de mejor calidad se cosecha en lugares donde los veranos son prolongados y no registran temperaturas muy elevadas, manteniendo buena humedad en el suelo, por lo que la nuez alcanza su total desarrollo, y cualidades gustativas.

Asimismo, la planta necesita de algunas horas de frío.

Las temperaturas bajas del invierno no limitan el cultivo del nogal, ya que si en el período vegetativo se suman las horas de calor necesarias, el frío no excluye el cultivo en áreas frías.

El nogal tiene como uno de los principales inconvenientes que, tiende a iniciar el transporte de savia ante el primer aumento de temperatura.

Por lo tanto, las primeras heladas fuera de estación, más aún las de comienzo de la primavera, tendrán un impacto mayor.

También las primeras heladas de otoño, son dañinas porque desecan el extremo de las ramas poco lignificadas.

Las heladas tempranas de otoño suelen generar daños en los últimos brotes, impidiendo que broten en la próxima primavera.

Por ende, las heladas tempranas o tardías, perjudican la fructificación, debido a que las nueces se originan, comúnmente, en brotes de yemas terminales, no afectando el vigor de todo el árbol, salvo cuando las heladas son mas frecuentes e intensas.

Si durante el desarrollo de la planta, las temperaturas fuesen de 33º C. o mayores, con vientos calurosos, las almendras aceleran su madurez y toman coloraciones fuera de lo normal.

En general, el nogal es vulnerable a las temperaturas extremas, sobre todo las cercanas a 40º, y que si están acompañadas por sequías puede ser causante de producción de frutos vacíos.

En el caso de tener temperaturas superiores a los 38º C., acompañadas de baja humedad, puede causar quemaduras por el sol en las nueces más expuestas.

Cuando esto ocurre al comienzo de la estación, el nogal producirá nueces vacías, pero si esto se da mas tarde, las semillas pueden arrugarse, adherirse al interior de la cáscara, u oscurecerse.

cómo cultivar un árbol de nogal
cómo cultivar un árbol de nogal

Riego: El nogal necesita un mínimo de agua para poder vegetar y producir su fruto. La práctica del riego es elemental para que el desarrollo de la planta sea rápido y homogéneo, y para obtener una producción de nueces importante y de calibre regular.

En lugares de veranos secos y calurosos, este árbol se desarrolla en terrenos profundos, mientras que en zonas de lluvias primaverales y estivales frecuentes, se desarrollará sin problemas, hasta en suelos poco profundos o superficiales.

Puede ser útil repoblar terrenos húmedos con esta especie.

Para que el cultivo sea posible, el nogal necesita precipitaciones mínimas de 700 mm., y para explotaciones intensivas será de 1000 a 1.200 mm.

Aunque la cantidad de precipitaciones no es lo único que importa, también su distribución a lo largo del año, por lo que si fueran insuficientes y/o mal distribuidas habrá que recurrir al riego para que el nogal se desarrolle con normalidad y produzca nueces.

Poda: El objetivo de la poda, es controlar el tamaño de estos árboles, mantener su vigor, y la producción en las ramas fructíferas, así como reemplazar las ramas viejas y menos productivas, por otras nuevas, además eliminando las ramas secas o que están mal situadas se consigue que la luz solar llegue a todas las partes del árbol.

Fuente: infoagro

Imágenes:
http://www.flickr.com/photos/floresalud/317081585/
http://www.flickr.com/photos/fturmog/2020912544/

Volver al inicio