Escritorio para oficina de diseño retro

Combinar líneas rectas y curvas de forma armoniosa nunca es tarea sencilla, sin embargo Toby Howes creó este atractivo escritorio para oficina inspirándose en mobiliario de los 50’s. Uniendo un diseño logrado a una gran funcionalidad, Molly es un mueble de oficina único.

A simple vista no podemos distinguir de qué se trata, es un escritorio?, es una mesa?. Allí parte la clave para el encanto de esta pieza de mobiliario de oficina, escondiendo su verdadera función. Este detalle, en el mundo del diseño, suele ser una muy buena señal, donde frecuentemente ocultar la funcionalidad es una necesidad.

Al diseñador británico se le ocurrió esta idea para un cliente que siente profunda pasión por los muebles de los 50’s. Debía ser capaz de crear un escritorio que conjugue el utilitarismo de la época con la sensación de estar suspendido en el aire. Es desafio se cumplió con creces, resultando en una composición de claros y oscuros, líneas rectas y curvas, encuentros complejos con estilo simple y materiales de lujo.

Se trata de un mueble de oficina único, construido en madera de Nogal Americano de excelente calidad y frentes nacarados. Todo bajo la elegancia y ligereza que otorga el cristal. Todas las terminaciones metálicas son cromadas y las uniones entre maderas se realizaron con tornillos también cromados, pero solo visibles desde el interior, por lo que el aspecto se mantiene en todo momento muy limpio, liviano y hasta transmite una leve fragilidad.

El espacio de almacenamiento es una cajonera que intenta disimular su función desprovista de tiradores, al ser el elemento más prominente del mueble, dispone mucho peso visual sobre su lado, generando con sus líneas rectas gran contraste con el resto del diseño. La silueta del cristal no es caprichosa, responde a fines ergonómicos para mayor comodidad a la vez que recuerda un piano de cola.

Visto en http://freshome.com/2010/04/09/a-writing-desk-or-a-funky-coffee-table/